El verano está oficialmente aquí, lo que significa un clima más cálido, más eventos, más multitudes, más diversión y, lamentablemente, más amenazas para su audición y dispositivos de asistencia auditiva. Mientras se toma tiempo fuera del trabajo o la escuela, tenga en cuenta que tomarse un tiempo libre de su salud auditiva puede ser perjudicial. El daño a su audición es irreversible y el daño a sus audífonos puede ser costoso. Hemos compilado algunos consejos simples para ayudarle a proteger sus oídos mientras disfruta de un verano lleno de diversión.
¿A quién no le gusta darse un chapuzón en la piscina o hace un viaje a la playa local o parque acuático en los calurosos días de verano? Si participa con frecuencia en actividades relacionadas con el agua, es probable que el oído del nadador no sea algo extraño para usted. El oído del nadador es una infección causada por la humedad y el agua atrapada en el oído, lo que provoca el crecimiento de bacterias y / u hongos. Al igual que otras infecciones de oído, puede ser incómodo e incluso doloroso, y contribuir a la pérdida de audición temporal. Para protegerse del oído del nadador y de infecciones similares, use un gorro de baño, tapones para los oídos y asegúrese de secarse completamente las orejas después de estar en el agua.
El verano también se llena de conciertos, festivales, exhibiciones de fuegos artificiales y otros eventos emocionantes (y ruidosos). No tiene que dejar de ver a sus artistas favoritos actuar o mostrar su patriotismo en la celebración del 4 de julio, pero debe tener en cuenta a sus oídos y el daño que puede causar la exposición prolongada a ruidos fuertes. La pérdida de audición inducida por ruido (NIHL) por sus siglas en inglés, a diferencia de otros tipos de pérdida auditiva, puede prevenirse fácilmente. Cuando asista a eventos en los que estará expuesto a ruidos fuertes, el uso de tapones para los oídos puede reducir los niveles de decibelios, haciendo que el ruido sea más fácil para sus oídos. También debe considerar su elección de asiento. Es tentador querer sentarse cerca de la acción, pero cuanto más cerca esté del ruido, mayor será la posibilidad de dañar su audición.
Para las personas con problemas de audición y que usan audífonos, cuidar sus dispositivos es aún más importante durante el clima más cálido. Además de pasar más tiempo haciendo actividades acuáticas, las personas tienden a sudar más durante el verano y exponen sus audífonos a la humedad, lo que crea un ambiente cargado de humedad para sus oídos. Sus audífonos deben mantenerse lo más secos posible para evitar el mal funcionamiento y los costosos daños.
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